Tots tenim conflictes, problemes de convivència,
familiars, a la feina, amb els veïns ... Sovint no sabem com posar-nos a
resoldre la situació. El mediador pot ajudar-nos a abordar la situació,
identificar i minimitzar el conflicte, aturar conseqüències, avançar-se a
esdeveniments problemàtics, en fi, donar-nos eines per gestionar el conflicte i
trobar el consens. L’acord es pot formalitzar davant un notari i té
transcendència jurídica, o bé es pot facilitar a l’advocat a fi que obtingui el
reconeixement judicial segons convingui. Un procés de mediació té l’avantatge
de ser més ràpid que qualsevol procés judicial i fins i tot que el procés de
negociació. I el més important, permet fer-se responsable de la resolució
del conflicte, per tant, garantir-ne la satisfacció i el compliment en raó de
la implicació en la pròpia gestió.
En aquest blog podeu trobar informació en relació als drets de la persona, sobretot en el seu entorn més immediat, el de la família. Conèixer els nostres drets i obligacions ens permet prendre decisions i assumir compromisos d'una manera més plena, conscient i lliure, i per tant, també ens permet actuar de forma coherent amb les nostres responsabilitats.
30/11/14
29/11/14
El dret a decidir sobre la nostra qualitat de vida en un futur.
En previsió de
trobar-nos en una situació en la qual a causa d’una malaltia, accident o
deficiència, no puguem tenir cura i/o prendre decisions sobre la nostra persona
i patrimoni, podem nomenar un apoderat perquè aleshores vetlli pels nostres
interessos, podem fer un testament vital (document d’instruccions
prèvies en l’àmbit de la salut) o podem nomenar el nostre tutor pel cas que
sigui necessari en raó d’una declaració judicial d’incapacitació (autotutela).
Igualment, els pares poden nomenar tutors o administradors del patrimoni dels
seus fills menors o declarats incapaços pel supòsit que ells faltin.
L’advocat ens pot
assessorar en l’utilització de distints recursos legals que les persones tenim
a l’abast per preveure una futura situació de dependència i per tant,
assegurar-nos que es compleixi la nostra voluntat si per diferents
circumstàncies derivades del nostre estat físic o psíquic no podem expressar-la,
és a dir, per poder decidir anticipadament sobre la nostra qualitat de vida.
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autotutela,
testament vital
25/11/14
La relació dels fills amb altres familiars o persones pròximes.
Els fills tenen dret a
relacionar-se amb els avis,
els germans i altres persones pròximes,
i tots aquests tenen també el dret de relacionar-se amb els fills. Els progenitors han de facilitar aquestes
relacions i només les poden impedir si hi ha una causa justa.
Els Tribunals poden garantir la relació o bé limitar-la en interès dels
fills.
Tribunal
Supremo (Sala de lo Civil, Sección 1ª).Sentencia núm. 320/2011 de 12 mayo RJ\2011\3280 "el interés eminente del menor
consiste, en términos jurídicos, en salvaguardar los derechos fundamentales de
la persona, los derechos de su propia personalidad. En el fondo, no es otra
cosa que asegurarle la protección que merece todo ciudadano en el
reconocimiento de los derechos fundamentales del individuo como persona
singular y como integrante de los grupos sociales en que se mueve, y en el
deber de los poderes públicos de remover todo obstáculo que se oponga al
completo y armónico desarrollo de su personalidad". Por tanto, en lo
correspondiente al derecho a tener relaciones con parientes y allegados, hay
que tener en cuenta que el niño no puede ver recortada la relación y
comunicación con personas que le son próximas humana y afectivamente, por causa
de las diferencias entre dichas personas. Por ello, el interés del menor obliga
a los tribunales a decidir que el niño tiene derecho a relacionarse con los
miembros de su familia, con independencia de que entre ellos existan o no lazos
biológicos.”
GUARDA COMPARTIDA. DEDUCCIÓ DELS PAGAMENTS EN L’IRPF.
Resolució del TEAC, 03654/2014/00/00, Vocalia
12ª, de 11/09/2014 . Fundamentos de Derecho III.- El artículo 64 de la
LIRPF dispone las siguientes especialidades aplicables en los supuestos de
anualidades por alimentos a favor de los hijos:
“Los contribuyentes que satisfagan anualidades por
alimentos a sus hijos por decisión judicial, cuando el importe de aquéllas sea
inferior a la base liquidable general, aplicarán la escala prevista en el
número 1º del apartado 1 del artículo 63 de esta Ley separadamente al importe
de las anualidades por alimentos y al resto de la base liquidable general. La
cuantía total resultante se minorará en el importe derivado de aplicar la
escala prevista en el número 1º del apartado 1 del artículo 63 de esta Ley, a
la parte de la base liquidable general correspondiente al mínimo personal y familiar
incrementado en 1.600 euros anuales, sin que pueda resultar negativa como
consecuencia de tal minoración”.
Previsión que se reproduce en el artículo 75 de la LIRPF a
efectos de la aplicación de la escala autonómica.
Por su parte, el artículo 58 del mismo texto legal regula
en los siguientes términos el mínimo por descendientes:
“1. El mínimo por descendientes será, por cada uno de
ellos menor de veinticinco años o con discapacidad cualquiera que sea su edad,
siempre que conviva con el contribuyente y no tenga rentas anuales, excluidas
las exentas, superiores a 8.000 euros, de:
1.836 euros anuales por el primero.
2.040 euros anuales por el segundo.
3.672 euros anuales por el tercero.
4.182 euros anuales por el cuarto y siguientes.
A estos efectos, se asimilarán a los descendientes
aquellas personas vinculadas al contribuyente por razón de tutela y
acogimiento, en los términos previstos en la legislación civil aplicable.
Entre otros casos, se considerará que conviven con el
contribuyente los descendientes que, dependiendo del mismo, estén internados en
centros especializados”.
Precepto este último que debe ser completado con lo
dispuesto en el artículo 61 de la LIRPF en el que se regulan las normas comunes
para la aplicación del citado mínimo por descendientes y conforme a las cuales:
a) Cuando dos o más contribuyentes tengan derecho a la
aplicación del mínimo por descendientes, respecto de los mismos descendientes,
su importe se prorrateará entre ellos por partes iguales.
b) No procederá la aplicación del mínimo por descendientes
cuando los descendientes que generen el derecho a los mismos presenten
declaración por este Impuesto con rentas superiores a 1.800 euros.
c) La determinación de las circunstancias personales y
familiares que deban tenerse en cuenta a efectos de lo establecido en los
artículos 57, 58, 59 y 60 de la LIRPF se realizará atendiendo a la situación
existente en la fecha de devengo del Impuesto.
A lo anterior debe añadirse que en los supuestos de
separación matrimonial o divorcio, el mínimo por descendiente corresponderá a
quien tenga atribuida la guarda y custodia de los hijos a la fecha del devengo
del Impuesto, al tratarse del progenitor que convive con aquellos. No obstante,
procederá el prorrateo por partes iguales cuando la guarda y custodia sea
compartida, con independencia de quién sea el progenitor con el que convivan a
la fecha del devengo.
En los casos que nos ocupan en el presente recurso
extraordinario para la unificación de criterio, los obligados tributarios se
aplican el 50 por 100 de la cuantía del mínimo por descendientes, derivado del
descendiente del cual tienen la guarda y custodia compartida juntamente con el
otro progenitor, de quien se han separado o divorciado.
En tales supuestos, el Director recurrente concluye que la
aplicación del mínimo por descendientes y del tratamiento previsto para las
anualidades por alimentos son incompatibles y, más aún, entiende que en estos casos
sólo cabe aplicar el mínimo por descendientes prorrateado al 50%, sin que quepa
aplicar beneficio fiscal alguno por los alimentos pagados a los hijos. Es
decir, que estos beneficios no pueden aplicarse conjuntamente y además que no
es una opción del contribuyente el aplicar uno u otro sino que necesariamente
prima el mínimo por descendientes sobre la aplicación separada de la escala de
gravamen al importe de las anualidades por alimentos.
Dicho de otra manera, se sostiene que la aplicación
separada de las escalas de gravamen que contemplan los artículos 64 y 75 de la
LIRPF está supeditada a que el contribuyente que satisface las anualidades por
alimentos en favor de sus hijos por decisión judicial no conviva con ellos,
resultando además en estos casos (posibilidad de aplicar el beneficio fiscal
del mínimo por descendientes o la escala de gravamen de forma separada) de
aplicación prioritaria y obligatoria el mínimo por descendientes.
Pues bien, ninguna de estas dos consideraciones se
encuentran recogidas en nuestra actual legislación, pues los artículos 64 y 75
no establecen como requisito que no existan convivencia con el hijo a favor del
cual se satisfacen los alimentos, ni el artículo 58 se erige como norma de
aplicación obligada caso de que concurra con la de los artículos 64 y 75, sin
que la ausencia de estas pretendidas reglas sea una laguna en la norma que
pueda rellenarse acudiendo a la figura de la interpretación, sino que, bien al
contrario, son un requisito (que no existan convivencia con el hijo a favor del
cual se satisfacen los alimentos) y una regla (la aplicación preferente del
mínimo por descendientes) que no existen actualmente y que sólo podrían
introducirse, en su caso, vía modificación legislativa.
La interpretación, según nuestra mejor doctrina, consiste
en determinar el verdadero significado o alcance de las normas jurídicas, lo
que no se da en el supuesto aquí examinado, pues dados los términos en los que
los preceptos citados están expresados, la interpretación sistemática y finalista
que se propone por el recurrente, implicaría un auténtico desarrollo de la
norma, en una función necesariamente legislativa y no meramente interpretativa.
A mayor abundamiento, estima el recurrente que “De no
interpretarse estos dos beneficios como incompatibles (con preferencia del
mínimo por descendientes por ser la regla general), se estaría haciendo de
mejor condición a los padres que han pasado por un proceso de nulidad,
separación o divorcio matrimonial y que tienen la guarda y custodia compartidas,
que a los padres que no han pasado por esos procesos y que, sin embargo,
soportan igualmente la carga de sostenimiento de sus hijos (pensemos, por
ejemplo, en una unidad familiar formada por dos cónyuges y sus hijos). Es
decir, el beneficio fiscal estaría atendiendo no a la carga económica que
soporta el contribuyente para el sostenimiento de sus hijos (...) beneficiando
más a unos "estados civiles" que a otros”. En efecto, así sucede en
la normativa del IRPF, que discrimina en contra de los contribuyentes casados y
no separados legalmente con hijos a cargo, pero sólo de nuevo vía modificación
legislativa sería posible evitar estas situaciones. La comparación no debería
hacerse entre los contribuyentes casados y no separados legalmente con los contribuyentes
que están divorciados/separados y que tienen atribuida la guarda y custodia
compartida de sus hijos menores satisfaciendo anualidades por alimentos, sino
que la comparación, caso de plantearse, sería, para comparar términos
homogéneos, entre los contribuyentes separados/divorciados que satisfaciendo
anualidades por alimentos tienen la guarda y custodia compartida con la de
aquellos que, en la misma situación de divorcio o separación, no tienen
atribuida la guarda y custodia de sus hijos menores. Planteados así los
términos de la comparación, resultaría que la interpretación que se propugna
por el Director recurrente discriminaría a unos contribuyentes frente a otros,
por el solo hecho de haber optado, voluntariamente en la mayoría de los casos,
por la guarda y custodia compartida de sus hijos menores, que es precisamente
la figura que se ha intentado incentivar con la reforma del artículo 92 del
Código Civil. Como se ha reflexionado anteriormente, los contribuyentes a los
que se hace de peor condición son los casados y no separados legalmente con
hijos a cargo, para los que ningún beneficio fiscal semejante se contempla, a
pesar de que ellos, además de convivir con sus hijos, también satisfacen sus
alimentos. Pero la normativa del IRPF lejos de ser neutral está plagada de este
tipo de situaciones que solo el legislador podría solventar. Así, por ejemplo
discrimina en contra de los rendimientos del trabajo si los comparamos con la
tributación de las rentas del capital mobiliario, o discrimina en general en
contra de las personas físicas si comparamos su tributación con la de los
beneficios de las personas jurídicas, al someter a aquéllas a fuertes tipos
progresivos.
En virtud de todas las consideraciones anteriores, se
desestima el presente recurso.
En este mismo sentido se pronuncian no solo el Tribunal
Económico-Administrativo Regional de la Comunidad Valenciana, sino también el
Tribunal Económico-Administrativo Regional de Galicia en resolución 15/683/2013
de fecha 30 de julio de 2013; el Tribunal Económico-Administrativo Regional de
Andalucía (Sala Desconcentrada de Málaga) en resolución 29/3688/2012 de fecha
28 de marzo de 2014); así como el Tribunal Económico-Administrativo Regional de
Asturias en resolución 52 /1175/ 2013 de fecha 16 de junio de 2014.
Por lo expuesto
EL TRIBUNAL ECONÓMICO-ADMINISTRATIVO CENTRAL, EN SALA,
visto el recurso extraordinario de alzada para unificación de criterio
promovido por el DIRECTOR DEL DEPARTAMENTO DE GESTIÓN TRIBUTARIA DE LA AGENCIA
ESTATAL DE ADMINISTRACIÓN TRIBUTARIA, ACUERDA DESESTIMARLO, fijando como
criterio el siguiente:
El tratamiento previsto en los artículos 64 y 75 de la Ley
35/2006, de 28 de noviembre, del Impuesto sobre la Renta de las Personas
Físicas, es aplicable para las anualidades por alimentos satisfechas en virtud
de decisión judicial a favor de los hijos en aquellos casos en los que el
contribuyente que satisface las anualidades ostente la guarda y custodia
compartida respecto de sus hijos, contribuyente que también tendrá derecho a aplicar
el mínimo por descendientes.
EL MENOR POT DECIDIR AMB QUI VOL VIURE EN UNA SITUACIÓ DE RUPTURA DE LA CONVIVÈNCIA DELS PROGENITORS ?
SENTÈNCIA DEL
TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTÍCIA DE CATALUJNYA 2/2014, de 09/01/2014, Recurs
Ponent: Mª Eugenia Alegret Burgues. Recurs 95/2013.
Fundamentos
de Derecho V.-… El art. 233.11.1.e) CCCat dice en relación con los
procedimientos de nulidad, separación o divorcio que, para establecer el
régimen de guarda y custodia, deberá tenerse en cuenta, entre otros criterios,
" la opinión expresada por los hijos ", sin precisar su edad, aunque
el artículo 211-6, 2 ya había establecido que el
menor de edad, de acuerdo con su edad y capacidad natural y, en todo caso, si
ha cumplido doce años, tiene derecho a ser informado y escuchado antes de que
se tome una decisión que afecte directamente a su esfera personal o patrimonial.
El
derecho del menor a ser escuchado antes de tomar una decisión que le pueda
afectar no significa, sin embargo, que su opinión o su voluntad hayan de ser
determinantes en la resolución que se adopte. Su criterio debe tenerse en cuenta pero no puede
erigirse en elemento decisorio. En otro caso se incurriría en el riesgo de
convertir a los menores en sujetos y en objetos de la disputa de sus padres.
Así lo determina con claridad
el artículo 233-11,1 que obliga a una ponderación conjunta de los criterios
contemplados, siendo el único prevalente el del superior interés del menor
(211-6,1). En este sentido, no es irrelevante que la opinión de los menores
conste en el quinto lugar del artículo citado.
De este modo, los Tribunales
valoraran el contenido de la audiencia del menor conjuntamente con otros
factores ya que en ocasiones la voluntad expresada por los menores no coincide
con la voluntad real ni con lo que les resulta más beneficioso.
Naturalmente no cabe desconocer,
sin la ponderación de los otros criterios contemplados en la norma, y la debida
justificación o especial motivación, los deseos de los menores, cuando, como es
el caso, tiene suficiente juicio.
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dret del menor a ser escoltat
LA POTESTAT PARENTAL i decisions entorn els fills; canvi domicili i centre educatiu.
El pare i mare en virtut de les seves responsabilitats
parentals han de tenir cura dels fills, prestar-los aliments,
conviure-hi, educar-los i proporcionar-los una formació integral. Els progenitors, per a complir les responsabilitats
parentals, tenen la potestat parental (potestat
del pare i la mare) respecte als fills menors no emancipats (fins
els 18 anys). Per tant, ambdós
progenitors són els representants legals dels seus fills menors d’edat.
En exercici de les responsabilitats parentals (potestat parental)
els progenitors de comú acord han de decidir les qüestions relacionades amb
l’estat de salut del fill, tractaments i intervencions, el tipus d’ensenyament
o centre educatiu, un canvi de centre, el lloc de residència habitual i el
canvi de domicili si això aparta el menor del seu entorn habitual, entre
d’altres. Aquestes responsabilitats i representació, no varia pel
cessament de la convivència dels pares, pel que, les decisions s’hauran de continuar
prenent de comú acord en benefici i interès dels fills. Pel que, la regla
general, és que existint convivència o extingida aquesta, qualsevol dels
progenitors, fins i tot el guardador, necessita el consens de l’altre per tal
de variar el centre educatiu del fill menor o el domicili del fill si el canvi
l’aparta del seu entorn habitual. En defecte d’acord és menester l’autorització
judicial.
TS, Sala
Primera, de lo Civil, 536/2014, de 20 de octubre 4.- Se fija
como doctrina jurisprudencial la siguiente: el cambio de residencia al
extranjero del progenitor custodio puede ser judicialmente autorizado
únicamente en beneficio e interés de los hijos menores bajo su
custodia que se trasladen con el.
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canvi d'escola,
canvi de domicili,
potestat parental
12/11/14
En la normativa catalana es manté el principi que els béns adquirits a títol onerós (pagant una
contraprestació o preu) durant el matrimoni, pertanyen al cònjuge que consti
com a titular formal de l’adquisició (en el document, factura, escriptura, inscripció al registre
de vehicles de tràfic ...) . Pel que, existeix la presumpció de donació de la
contraprestació o preu si resulta que aquesta prové del patrimoni del cònjuge
no titular formal del bé. Ara bé, s'exclouen d’aquesta concepció els béns
mobles destinats a l'ús familiar, com ara els vehicles, el mobiliari, els
aparells domèstics o els altres béns que integren el parament de la casa. En
aquest tipus de béns, la mera acreditació de la titularitat formal, és sovint
poc significativa i, per això, atesa la destinació familiar dels béns, es
parteix de la premissa que pertanyen a ambdós cònjuges per meitats. Pel que, es
aconsellable que els préstecs de diners que es facin els cònjuges durant
la convivència constin en un document que pot elaborar un advocat i a fi
d’evitar possibles problemes o conflictes de futur, doncs a manca de pacte
escrit pot no resultar clar si els diners es van prestar i per tant, es van
deixar amb la voluntat de devolució o compensació en el supòsit de ruptura, o
bé, senzillament es van donar sense concórrer un ànim de recuperar-los en el
supòsit de trencament de la relació. En
definitiva, aquests documents no s’han d’entendre com un signe de manca de
confiança en l’altre, sinó tot el contrari, més aviat com una eina de
transparència i honradesa en els tractes durant la convivència o relació amb la
voluntat d’evitar malentesos que poden esdevenir en futurs conflictes difícils
d’abordar quan potser la relació i tracte és distint per qualsevol
circumstància.
L’advocat
pot aconsellar i confeccionar en el seu cas, un document d’acords abans d'inciar la convivència o durant aquesta, i sigui matrimonial o no, per regular les distintes relacions
econòmiques que van esdevenint entre els membres de la parella i que poden
tenir certa transcendència en un futur o en una situació de cessament o ruptura
de la convivència.
10/11/14
Parella estable
La normativa
catalana reconeix com a parella estable el fet de la convivència de dues
persones de manera anàloga a la matrimonial, en qualsevol dels casos següents, si
la convivència dura més de dos anys ininterromputs, si durant la convivència
tenen un fill comú, o si formalitzen la relació en escriptura pública davant
Notari.
5/11/14
la família
La norma catalana parteix del reconeixement
de que la família gaudeix de protecció legal, i a més, entén la
institució familiar com aquella que deriva, sense
discriminació, de
les relacions familiars en motiu del matrimoni, de la convivència estable en
parella i de les famílies formades per un progenitor sol amb els seus
descendents (monoparentals). A més, es
reconeixen com a membres de la família, els fills de cadascun dels progenitors
que convisquin en el mateix nucli familiar com a conseqüència de la formació de
famílies reconstituïdes. Ara bé, aquest reconeixement no altera els vincles amb
l’altre progenitor.
2/11/14
en aquest blog
En aquest blog podeu
trobar informació en relació als drets de la persona, sobretot en el seu entorn
més immediat, el de la família.
La seva autora, l’Eva Beneit Vila,
advocada en exercici, parteix de la necessitat d’apropar el coneixement
dels drets i obligacions de les persones d’una forma senzilla i entenedora,
i atès que sovint manca aquesta informació que creu del tot imprescindible en
el devenir diari de tota persona.
Disposar de la informació ens
pot ajudar en les nostres decisions per tal d’actuar de forma coherent amb les
responsabilitats de cada un. A més, el coneixement pot evitar conflictes,
malentesos o pot ajudar-nos a gestionar-nos els conflictes amb altres persones.
Conèixer els nostres drets i
obligacions ens permet exercir la nostra llibertat de decisió i compromís.
El conflicte forma
part de la pròpia vida, dels canvis que es van produint al llarg de la pròpia
existència i de les distintes relacions que mantenim amb el nostre entorn
familiar, empresarial, laboral i de convivència. Som responsables de les
nostres decisions i dels nostres actes pel que també hem de ser responsables de
la resolució dels conflictes en que ens podem trobar.
L’assessorament preventiu d’un advocat especialitzat en la matèria ens pot
ajudar a comprendre l’abast dels drets i obligacions i/o gestionar qualsevol
situació, problema o conflicte.
En el seu cas, l’advocat a més ens
pot dirigir i orientar en un procediment judicial o en un altre sistema de
resolució de conflictes distint al que delega en els Tribunals la decisió.
Qui subscriu aquest bloc creu que
els conflictes que es produeixen en motiu de la convivència o les relacions
familiars, en la mesura del possible cal evitar resoldre’ls acudint al sistema
judicial, ja que en definitiva aquest imposa la solució però sovint no resolt
el conflicte o el mateix procés en genera de nous. Existeixen
altres sistemes de resolució de conflictes especialment en
l’àmbit de les relacions de convivència o familiars, i en els que s’aposta per
un sistema de vida de més qualitat i equilibri, doncs fomenten la comunicació i
l’acord de present, i pel futur. Endemés, aquests sistemes ens ajuden a
transmetre determinats valors i dinàmiques en una societat que ha d’afrontar un
munt de problemes i noves situacions cada dia.
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